Sillman, un divorciado padre de familia, vive una situación muy delicada cuando es despedido de su trabajo en los muelles del puerto marítimo. Su futuro y el de su familia se presenta incierto, y su hijo le recomienda que vuelva al norte de África. Sin embargo Sillman tiene otras ideas: abrir su propio restaurante en un viejo barco oxidado del puerto. Las autoridades no le pondrán las cosas fáciles.