Mientras está trabajando en un puesto de control de sobriedad, Burgess encuentra un bolso marinero lleno de heroína en la camioneta de un respetado profesor universitario que dice que no sabe cómo la droga llegó a su vehículo. Voight decide no presentar cargos contra un sospechoso poco probable y Olinsky y Antonio siguen una pista para ver quién está detrás del contrabando de drogas.