En 1665, la peste negra diezmó considerablemente la población de Londres. Una leyenda dice que un famoso monje y médico de la peste inició el culto del sacerdote oscuro. Uno de los lugares en los que actuó fue el orfanato de Ludgate. Casi 350 años después, una ambiciosa estudiante de arqueología obsesionada con la historia del lugar decide hacer una última incursión. Sobre el orfanato pesa una orden de demolición tras el hallazgo de la bacteria de la peste...